Foto Etienne Zajega
Los libros son alimento. Aportan ideas, narraciones, historias e imágenes fundamentales para nutrir el intelecto y la existencia. Permiten una comunicación asíncrona con autores de cualquier tiempo y cualquier lugar abriendo la puerta a una comunión e intimidad que otros canales no producen. Por eso me parecen asombrosos.
En cualquier época han facilitado el aprendizaje y la ensoñación. Han logrado tender puentes sobre la sinrazón, el odio o la violencia. Nos han llevado a mundos nuevos dándonos a conocer infinidad de personajes.
La mejor forma de celebrar este tesoro es leyendo y compartiendo. De esta forma llegará un día en que nos demos cuenta de que todos tenemos algo que contar y nos pongamos a escribir. Tal vez un verso, quizá una carta, a lo mejor un libro.
Porque todas las ideas y palabras pertenecen a quien las recibe y entrega. Todos los libros son de quien los crea y de quien al leerlos les da vida. Es hermoso pertenecer a este misterio que va hilvanándonos a los que ya se fueron y a los que aún no llegaron. Que nos hermana con lenguajes arcanos y páginas por entero desconocidas.
Que la lectura te sea propicia para que tus palabras puedan serlo para otros.
2 comentarios:
cierto en lo que dice
Los libros, nuestro conocimiento y también tomar algún curso enarm son nuestras mejores armas para prepararnos de cara a buscar una especialidad médica.
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