Comparto hoy un texto nada académico, extraido de un contexto donde la medicina natural y el sentido común tienen más peso que la medicina técnica y el método científico. La poesía también cuenta en salud.
Expuesto en una pared de un consultorio terapeútico en Brazil:
Un resfríado ocurre cuando el cuerpo no llora...
Un dolor de garganta aparece cuando no es posible comunicar las aflicciones...
El estomago arde cuando la rabia no consigue salir ...
La diabetes invade cuando la soledad duele...
El cuerpo engorda cuando la insatisfaccion aprieta...
El dolor de cabeza deprime cuando las dudas aumentan....
El corazón renuncia cuando el sentido de la vida parece terminar...
La alergia aparece cuando el perfeccionismo es intolerable... Las uñas se quiebran cuando las defensas están amenazadas ...
El pecho aprieta cuando el orgullo esclaviza...
La presión sube cuando el miedo aprisiona...
Las neurosis paralizan cuando el "niño interno" tiraniza...
La fiebre sube cuando las defensas detonan las fronteras de la inmunidad....
Y tus dolores callados? Cómo hablan ellos a tu cuerpo?
Pero cuidado....elige qué hablar...con quién hacerlo....donde , cuando y cómo !
Solo los niños cuentan todo, a cualquier hora, de cualquier forma....
Elige a alguien que pueda ayudarte a organizar las ideas...a armonizar sensaciones y a recuperar la alegría ...!
Todos necesitamos saludablemente de un oyente interesado....
Pero todo depende , principalmente , de nuestro esfuerzo personal en que se produzcan
los cambios que deseamos para nuestra vida....... "
"EL CUERPO SUSURRA, DICE Ó GRITA, LO QUE LA MENTE NO PUEDE Ó QUIERE COMPRENDER"
Párate, escucha la Vida, respira la Vida, toca la Vida .... parece fácil, pero ....
ResponderEliminarMe gusta la profundidad de la frase:
"Conviértete en el cambio que deseas"
Es algo más que poesía.Puedo poner muchos ejemplos clínicos de cómo lo que no puede simbolizarse,se manifiesta en el cuerpo.Y es entonces cuando el cuerpo "habla".
ResponderEliminarAparte, el escrito es precioso.
La poesía es un lenguaje, que al igual que la música, alcanza fácilmente nuestra parte más honda.
ResponderEliminarEs bueno acudir frecuentemente a ella.