jueves, 4 de septiembre de 2014

El Privilegio de escuchar; lo que queda de él.



 Graffiti de Bansky



Tras leer el texto que el crítico literario J. Ernesto Ayala-Dip escribió recientemente en el diario El País me surge una justificada reflexión. Me parece que el señor Ayala-Dip tiene toda la razón. Los médicos cada vez somos más técnicos y menos humanistas, cada día usamos más herramientas tecnológicas y menos narrativas. El mercado y la sociedad han convertido la salud y la enfermedad en negocio y los sistemas sanitarios han derivado en una industria donde se buscan resultados. Hay que ver más pacientes en menos tiempo y proveer más servicios con menos dinero. Lógicamente pierden los pacientes que salen de la consulta sin que el facultativo apenas les mire y los galenos que no tienen tiempo de ejercer bien su oficio ni poder escuchar en condiciones a sus pacientes. Y es que con una lista de 40, 50 o 60 pacientes en una mañana no hay tiempo material para escuchar correctamente a casi nadie. Cuando comento con médicos de otros países que disponen de 15 a 30 minutos por visita que en España la media son 6 minutos y en algunas Comunidades Autónomas menos no dan crédito. Para desarrollar una medicina humanista hacen falta varios factores, unos dependientes del médico, otros de la organización sanitaria, otros de la sociedad y finalmente otros del paciente. Nuestros abuelos iban al médico solo cuando estaban realmente muy enfermos. No iban por catarros o diarreas leves, no iban a contarle al médico que estaban tristes o agobiados. Hoy sí. Hoy vemos mucha gente joven llorando en consulta, gente agobiada que no tiene otro sitio donde contar sus cuitas ni llorarlas. Vemos gente que consulta por motivos peregrinos a la menor tos o décima en el niño, por el menor malestar que ya no es tolerable. Los sistemas informáticos omnímodos y omnipresentes fagocitan cada vez más la atención de los profesionales sanitarios, hay que registrar todo lo registrable para que los gestores hagan sus números, contabilicen, optimicen, rentabilicen...

Tengo la suerte de tener varios médicos-escritores en mi familia. Sé de primera mano que la medicina es pura literatura, yo así me he formado y trato de ejercer. Pero también sé que la cosa está mal. La sociedad cada vez más enferma, la enfermedad más mercantilizada y la medicina más monetizada. El mercado ha invadido también esta esfera social y el ánimo de lucro terminará por malograrla del todo para perjuicio de absolutamente todos los actores. No tienen más que ver el paradigma de medicina estadounidense: por un lado millones de excluidos mendigos de una mínima beneficencia y por otro los que todavía pueden pagar los altísimos seguro,s que por cierto no apuntan buenos resultados en salud.

No tengo las respuestas, sí las ganas de seguir ejerciendo la medicina de la forma más humana posible apoyándome en la tecnología que mi conocimiento y mi criterio estimen más necesaria para cada caso. Sigo pensando que escuchar es un enorme privilegio a la par que una urgencia social. Nos conectamos a televisores y adminículos que nos sirven información diversa pero no nos escuchan. Para ser escuchados con propiedad requerimos de otra persona y eso no tiene visos de poderse tecnificar. Cuando llegue el momento en el que sea claramente imposible escuchar con un mínimo de rigor me enfrentaré con una terrible decisión. Una opción será decir basta y batallar contra la organización sanitaria, otra salirme de ella para ejercer de forma independiente; es la tercera la que me da más miedo. No ser capaz de mover ficha y seguir trabajando como si nada, viendo un paciente cada tres minutos olvidando que una vez fui médico pero terminé como veterinario. Como pueden ver el fondo de la crisis nos lleva a todos al mismo punto, al final cada cual deberá estipular hasta dónde llega su dignidad, si delegamos esta decisión pueden imaginar el desenlace.




 Les comparto el artículo citado:


El Privilegio de escuchar


La llegada de la tecnología a las consultas de la sanidad pública ha perturbado algunos hábitos. En las consultas de atención primaria, el médico que antes nos saludaba mirándonos a los ojos, ahora se ha trocado por una persona que apenas nos mira, apenas nos habla y apenas nos escucha, dada, supongo, la mucha prisa que tiene de suplantarnos por el siguiente paciente.
No es mi intención hacer ninguna crítica a la Seguridad Social, a la eficacia profesional con la que todavía se ocupa de nuestra salud. Podría protestarse ante las listas de espera para ser intervenidos en determinadas cirugías, cada día más ralentizadas en algunas comunidades autonómicas, debido al cierre de quirófanos (impelidos estos cierres por la austeridad presupuestaria); podríamos preguntarnos por el cierre de algunos centros de asistencia primaria en determinadas poblaciones, obligando a los pacientes de los mismos a desplazarse a localidades vecinas. En fin, a lo mejor poniéndonos muy exigentes, hasta podríamos aumentar el número de disfunciones descubiertas en materia logística. Pero, a la larga, dudo mucho que tengamos derecho a quejarnos más allá de lo pertinente. La medicina primaria en nuestro país en general funciona bien. Y en los servicios de tratamientos de patologías más inclementes, la atención y el cuidado altamente especializado es sencillamente impecable.
Lo que quiero hacer notar es algo que no afecta aparentemente a la situación clínica de los pacientes. Algo como más abstracto, pero no por ello menos real y comprobable. Lo que echo en falta cuando visito a un médico de la seguridad social es una mayor empatía, y como esta está tan ostensiblemente ausente, me conformaría con una simulación de esa empatía, una simulación de que nuestro médico conoce nuestro historial. O incluso a veces, que pueden ser muchas, echo en falta que simule que no le molesta mi visita. Ante esta situación, me pregunto: ¿Qué pudo haber pasado para que parte de la clase médica de nuestro país perdiera ante sus pacientes esa aureola de colectivo humano, cultivado e identificado siempre con el trato cordial?
Acabo de leer una novela de un escritor francés del que hasta hace poco no sabía nada de su existencia. Me refiero a Jacques Chauviré, muerto en el 2005 a los 90 años. Pues bien, se da la circunstancia de que Chauviré estudió medicina y comenzó a ejercerla en 1942. Su especialidad fue la pediatría, que ejerció casi toda su vida en la ciudad de Lyon. Con el tiempo, la práctica de la medicina se le hizo cada vez más desazonante, dado el asimétrico balance que establecía entre las vidas que salvaba y las que no. Ello lo llevó a buscar consuelo en la literatura, campo en el cual no tuvo el reconocimiento público que se merecía, salvo casi al final de su vida con el libro que tuve la alta dicha estética de descubrir.

Lo que echo en falta cuando visito a un médico de la seguridad social es una mayor empatía
Junto con el libro, había una nota de prensa que reproducía una entrevista que le habían hecho en 2004, con motivo de la publicación de Élisa, la novela a la que me refiero más arriba. Le preguntaban qué aporta el médico al escritor. Y Chauviré contestó: “Aporta la posibilidad de la observación. La consulta es un lugar privilegiado para conocer al otro y a la sociedad en general. En mi época, la literatura y la medicina eran hermanas porque en ellas todo era observación. Los médicos de los hospitales eran personas cultas. La medicina no era una disciplina científica, sino literaria: era fundamental escuchar, oír, ver”.
Esta familiaridad entre literatura y medicina subrayada por el escritor francés me hizo recordar que leí una vez que en algunas facultades de medicina de Norteamérica se imparten clases de literatura. Estas clases se marcan el objetivo de que la lectura de una novela, un cuento o un poema funcionen como herramientas de enseñanza en la educación médica.
Es en los centros oncológicos donde estas clases se hacen necesarias, según explican algunos directores de curso. A veces la introducción a las artes narrativas puede servir como punto de partida para afrontar como médicos sentimientos límites, como el sufrimiento o la muerte. “Los pacientes tienen algo que contarnos y los médicos somos unos privilegiados al poder escucharlos”, declara uno de estos directores.
Leí que en la facultad de Medicina de Pennsylvania se imparten clases sobre la obra narrativa y poética de William Carlos Williams, para quien el fundamento de la poesía estriba en las cosas y en los seres. Williams, que fue uno de los grandes poetas americanos del siglo XX, fue también médico durante cincuenta años en su ciudad natal, muy cerca de Nueva York. Ayudó a traer al mundo a más de dos mil quinientos niños.
Nuestros médicos no deberían dejar de mirar a los ojos a sus pacientes y escucharlos. Aunque tengan poco tiempo para tantas visitas. Sus relatos, además de servir como información clínica, sirven para que se sientan seres humanos y no simples receptáculos de medicación y hasta otro día.

J. Ernesto Ayala-Dip es crítico literario

@ayaladip


miércoles, 3 de septiembre de 2014

¿Cuando seas mayor te gustaría que te ataran?




Muchos ancianos con deterioro cognitivo en residencias geriátricas son atados de forma mecánica o farmacológica. Debido a los problemas de comportamiento que pueden desarrollar por su enfermedad o deterioro mental y a las habituales alteraciones de convivencia y de manejo en muchas situaciones se opta por aplicar sujeciones mecánicas de distintos tipos que impiden el movimiento de la cadera y/o las extremidades. En otros muchos casos se aplican potentes antipsicóticos que les mantienen en un estado de calma artificial, un duermevela extraño en el que no dan problemas.

¿Es eso lo que queremos para nuestros mayores? ¿Es eso lo que queremos para nosotros dentro de unos años?

¿Cómo definir la dignidad en el cuidado de personas mayores?
¿Cómo se pueden hacer mejor las cosas?





Vía Rincón de Sísifo

martes, 2 de septiembre de 2014

Rescatar a Ortega





Es bastante sorprendente ver lo poco leídos que son los próceres de la humanidad. En un tiempo en el que los estudiantes usan como recurso habitual la página web el rincón del vago para buscar un resumen del Lararillo de Tormes y obviar de esta forma su lectura, ¿cómo le vamos a pedir al ciudadano medio que lea a Ortega y Gasset? Pues aquí me tienen dando ejemplo. De este autor solo había leído algún artículo, reseñas de otros autores y un libro sobre su pensamiento. Bastante poco. Lo cierto es que Ortega fue un faro para la generación de nuestros abuelos y padres en los tiempos convulsos de la república y el herial intelectual de la postguerra. Porque Ortega fue sin duda un intelectual de su época y al leerle uno se da cuenta de lo necesarios que son aquellos capaces de compartir su sabiduría con los demás regalando una pedagogía a la sociedad que los acoge. Cualquiera que tenga estudios superiores sabrá que no son numerosos los profesores universitarios con el don de la buena docencia. La mayoría saben mucho pero sólo una pequeña minoría tiene la habilidad de transmitirlo en condiciones. De Ortega solo rescataré en este diminuto texto dos aproximaciones. Primero su cercanía a la cotidianidad a la hora de filosofar o reflexionar, su pensamiento no se pierde en las nubes, se mantiene cercano tanto en el foco como en el medio, en el lenguaje. En segundo lugar me permitiré compartirles una de las ideas favoritas que rescato de su basto pensamiento, el perspectivismo. Un concepto que define la situación humana de perspectivas múltiples que tiene cada cual según su posición circunstancial en el mundo, recuerden "yo soy yo y mi circunstancia". Estas perspectivas diferentes complementan la visión del paisaje que será obligatoriamente diferente si se contempla desde media ladera, el fondo del valle o desde la cumbre. Los seres humanos solemos tender a la monoperspectiva con una gran dificultad de tolerancia a todas las demás. Nuestra historia reciente con sus desastrosas consecuencias es buen ejemplo. Lamentablemente  a mayor incapacidad de comprender y respetar las otras perspectivas mayor dificultad para compartir la nuestra y buscar el ansiado consenso que solo es posible cuando todas las partes se ponen a mayor distancia de su propia visión. Dirimir los disensos a tiros o bombazos  sigue siendo rabiosamente habitual. Dicen los expertos que menos que antes, pero tristemente las balas son mayores. Esto también es aplicable a nuestra cotidianidad relacional, cada individuo es suma de muchas voces interiores, cada pulsión, deseo o necesidad tiene su voz en el parlamento interno. La forma que tiene nuestra conciencia de poner orden es usando los mecanismos de defensa clásicos que describió Freud, negando, reprimiendo, con formaciones reactivas y sublimando. No me extenderé. Tan solo señalar que desde la primera persona estamos acostumbrados a negarnos y reprimirnos, lo que explica que en la segunda y la tercera nos pase lo mismo. Valorar la importancia de la perspectiva en cada circunstancia personal nos puede aportar comprensión y visión. Cuando una necesidad, deseo o preocupación nos nuble la conciencia y ocupe por entero nuestros pensamientos bastará con recordar que es tan solo una perspectiva de las muchas posibles para empezar a caminar buscando otra y dejar atrás el bloqueo y el consiguiente sufrimiento. Favorecer y entrenar una mayor flexibilidad a este nivel nos permitirá modular el enfoque de nuestra visión y gozar así de una mejor profundidad de campo y un ángulo visual más amplio. La rigidez nos obliga a mantener un determinado enfoque que estrecha la realidad difuminando el resto. Es cierto que los enfoques rígidos dan más seguridad al delimitar con precisión quienes son los buenos y quienes los malos, donde está el blanco y donde el negro. Los nacionalismos o extremismos políticos, los integrismos filosóficos o religiosos son ejemplo. También lo son los efectos que suelen causar los mismos. Esta reflexión no impulsa a mantener un relativismo informe que nos relegue a una comunidad hippie o a la pastosa música de fondo de la new age. Lo que nos dará más valor es darnos cuenta de que a fin de cuentas nos relacionamos con el mundo según lo hagamos con nosotros mismos y que nuestra forma de mirarnos y tomar conciencia es lo que nos permite acercarnos y compreder a los demás. Desempolvar los clásicos siempre es una buena ayuda, es cierto que pasaron pero también lo es que seguimos teniendo la oportunidad de  seguir conversando y reflexionando con ellos. Las preguntas siguen siendo las mismas para todos, son las respuestas las que nos esperan a cada cual en los recodos del camino.





lunes, 1 de septiembre de 2014

La sed de eternidad




Todo el mundo quiere vivir para siempre. Es un deseo universal que en algunas personas se hace vehemente. En todas las épocas encontramos ejemplos que trataron de hacerse con la gloria, unos pocos lo consiguieron, la mayoría fallaron o cayeron en el olvido. Lo cierto es que los vivientes estamos hechos para el presente y no para el futuro. Más que eternidad lo sensato sería perseguir la presencialidad, avanzar en la capacidad de vivir plenamente el presente. Pocos lo consiguen sin embargo. No es nada fácil encontrase con un ser centrado en el ahora. Lo habitual es que cada cual cargue con sus asuntos, oscilando entre un pasado lleno de culpa y remordimientos y un futuro rico en miedo e incertidumbre. Pasamos muy poco tiempo degustando el ahora y de esa forma desperdiciamos las mejores porciones de la breve vida que nos toca vivir.  Por otro lado la conciencia de muerte nos llena de profunda desazón. Saber que tenemos un fin nos condiciona y habitualmente nos llena de miedos. Una de las primeras construcciones culturales del paleolítico fue la explicación de lo que ocurre más allá de la muerte. Los primeros homínidos enterraron a sus muertos con la creencia de que, de alguna forma, seguirían viviendo más allá. La muerte es un mecanismo biológico consecuencia del fallo de sistemas que condiciona la insostenibilidad del equlibrio del sujeto con el medio. La detención del tiempo corporal arrastra las de la conciencia y la identidad. Siempre nos hemos preguntado qué pasa con ellas. A ciencia cierta no lo sabemos pero podemos hacer algunas inferencias más allá de las posiciones más comunes  de la nada y la resurrección de la carne. Si en un sistema complejo atendemos a una parte podremos establecer un inicio y un final, pero nunca si atendemos al sistema completo. En la superficie del mar se forman y destruyen millones de olas cada instante, si observarmos cualquiera veríamos que tiene un tiempo limitado de existencia durante el cual evoluciona y se desplaza para luego desaparecer. Desaparece la forma pero sigue  siendo mar. La visión humana nos condiciona para atender los fenómenos desde una perspectiva, que si bien es variable también es limitada y condicionada. Desde esa perspectiva reflexionamos y ordenamos nuestra explicación del mundo y de la vida. Es cierto que el cuerpo humano al morir desaparece como tal y sus componentes vuelven a incorporarse a los ciclos vitales del planeta. La conciencia y la identidad desaparecen pero durante su existencia emitieron su luz que alimentó, influyó y modificó su entorno de una manera única. No somos capaces de medir ese influjo ni en tiempo presente ni en futuro pero sí deducir que pertenece a este universo y que tal vez lo que consideramos principio y final dependa de nuestra posición de observadores y nuestra circunstacia. 

La reflexión tranquila y la contemplación de la vida y la muerte, de todos los fenómenos que surgen para después marchar es una de las mejores formas que conozco para calmar la desazón que produce la muerte y la enorme sed de eternidad que podemos llegar a desarrollar. Por otro lado tratar de vivir lo más plenamente posible la existencia, teniendo el centro de gravedad en el presente y aceptando aquello que la vida nos vaya proponiendo son también trazas de sabiduría.  Las creencias y la fé pueden ser potentes ayudas pero no suficientes, creánme si les digo que he visto morir desazonados a muchos religiosos profesionales. Y por último un apunte esencial respecto a encarar de la mejor manera un desenlace lo constituyen los arreglos de cuentas y las despedidas. Todos sabemos que liberarnos de deudas produce tranquilidad de ánimo. Las que mas pesan son las deudas personales, las cuestiones pendientes, los desencuentros con la gente más relevante para nosotros. Poder estar en paz con ellos nos ayuda a estar en paz con nosotros. 

La verdadera gloria se esconde en la contemplación de un amanecer, en el abrazo de la persona que amamos y en la inspiración lenta del que se sabe plenamente presente. Tal vez no nos recuerden o tal vez sí cuando hayamos pasado, que eso no nos limite nuestra capacidad de gozar plenamente el bello río de instantes que llamamos vida. 




viernes, 29 de agosto de 2014

La gente feliz lee y toma café




Una de las cosas que me indica el grado de calidad de unas vacaciones es disponer de tiempo abundante de lectura. Tal vez por eso me gustó el título la novela de Agnès Martìn-Lugard que inspira esta reflexión. En primer lugar, pese a que se hable de la felicidad cada vez más, es extraño encontrarse con gente feliz. Si uno pasea por cualquier ciudad moderna, echa un vistazo dentro de un autobús o tren de cercanías o se sienta tranquilo a ver pasar la gente, lo normal es encontrar rostros adustos, algunos crispados, otros quizá en las nubes. Si pudiéramos por un momento visualizar sus pensamientos aparecerían ante nosotros mil películas. En una saldría su protagonista con el jefe, en otra con la novia, en aquella discutiendo con la familia, en esta de acá saldría el coche de  sus sueños, en la del final la deseada muchacha del quinto... todos caminamos por la vida con nuestros asuntos y se los dejamos ver a muy pocos. La historia de la novela de Martin-Lugard es la historia de un duelo, de una mujer terriblemente herida y su viaje para cruzar ese desierto y mostrar su película a los demás, que como muchos saben es una de las formas más potentes de terminar sanando nuestras heridas. Es un libro de una creadora novel pero solvente, lectura ligera pero no superficial, que nos muestra paisajes humanos creíbles. Tal vez si la gente leyera más y tomara lentamente su café disfrutaría más de la vida, lo que sí es bastante verosímil es que escribir y compartir una novela con el mundo es muy liberador para el que lo hace y en casos como este placentero para el que la lee. Nos hace felices dar lo mejor que tenemos a los demás, hay pocas escusas válidas para inhibirnos. Me gustó saber que este libro fue autoeditado en Amazon en un primer momento tras ser rechazado por las editoriales que solo se interesaron por él cuando empezó a difundirse con rapidez. Habrá que ir pensando en mandar algo a Amazon además de seguir leyendo y tomando café.





martes, 26 de agosto de 2014

La foto del sistema sanitario






De "a cada uno según su necesidad" a "a cada uno según su capacidad de presionar". Esa es la foto actual de nuestro sistema sanitario. Javier Padilla


Los sistemas sanitarios son una fiel imagen de la sociedad que los sostiene. Nuestros abuelos y padres lucharon para reconstruir un país arrasado y arruinado. Construyeron los cimientos de nuestra moderna sociedad, muchos de sus derechos, muchos de sus servicios públicos. La situación de crisis y decrecimiento global ha barrido muchos de ellos pero lo peor no es eso. Lo más trágico es el hecho de ver a unos pocos saqueando el esfuerzo de muchos y a otros muchos luchando entre sí por las migajas de su pequeña parcela de influencia. Unas migajas que son pan para algunos y miserias para otros. 

En sanidad siempre ha habido prioridades. Cada estructura es necesaria en su tamaño y justa proporción como lo son cada una de las piezas de un avión. ¿Qué pasaría si los constructores de alas quisieran más recursos para hacerlas más grandes y lo mismo dijeran los ingenieros del tren de aterrizaje o la carlinga... Acabaríamos con un avión deforme y, peor aún, obsoleto e inservible. Es lo que esta pasando. Desde hace años se ha hipertrofiado la estructura hospitalaria, cara, hipertecnificada y redundante minimizando recursos de centros de salud, medicina rural y otros montos no priorizados. Esta tendencia se ha agrabado dada la feudalización del sistema. Hay jefes de servicio muy poderosos con acceso directo al consejero de sanidad. Gerentes de hospital con más poder que muchos alcaldes... No esperen a que ellos se reduzcan el presupuesto, no hay gestor que sea capaz  de hacerlo por su propia iniciativa. Se precisa liderazgo, inteligencia colectiva y perspectiva para determinar qué decisión redunda en mejora del bien común y no de los votos para la próxima elección. Se necesitan ciudadanos que participen, escriban, hagan valer su voz. Tenemos delante la posibilidad de democratizar o feudalizar nuestra sociedad y cultura. Es tarea de todos.

sábado, 23 de agosto de 2014

España partida en dos





Julian Casanova es catedrático de historia contemporánea en la universidad de Zaragoza. Su último libro esboza una breve historia de la guerra civil española que me he animado a leer tras escuchar este verano, una vez más, las narrativas familiares sobre ese tema que mis padres compartieron en las largas sobremesas estivales. Debo confesar que si bien es un tema que mi cultura general comprende suscita en mi reacciones encontradas y poca apetencia a investigar, por eso me ha venido muy bien el libro de Casanova. Muchos de los retos que la sociedad española encara en estos momentos son los mismos que afectaron la vida de nuestros padres y abuelos. La solución por la vía de las armas que les tocó vivir sigue teniendo consecuencias a dia de hoy. Encontrar consensos o líneas de diálogo es tan difícil como entonces pero la complejidad de los problemas es hoy si cabe mayor al afectarnos la globalización y los retos de la sociedad/red del conocimiento y la información. Saber comunicarse, escuchar las opiniones y posturas distintas a la propia y tener la habilidad de fundamentar nuestra posición buscando el punto de contacto con el otro y el horizonte de bien común es el reto antinguo que nos llega a nuestra sociedad quizá más evolucionada y desarrollada a la par que más dependiente y vulnerable. 

La guerra civil fue un tremendo desastre que dejó tras de sí un precio en sangre y dolor exorbitante. Todas las familias españolas tienen sus historias, todas sus víctimas y verdugos. Nos acompañan hoy en nuestros sueños y desvelos. Por eso siento como responsabilidad personal la  obligación de recordar, tratar de entender y aplicar a mi vida y a la de los que me rodean las enseñanazas de tan importante lección. Algo hemos de aprender todos de esta gran demostración de intolerancia, odio, violencia, horror y sin sentido. 

De momento este verano me ha traído de nuevo la oportunidad de escuchar y leer narrativas de una España partida en dos, historias de terrible actualidad por cuanto esa ruptura sigue estando de alguna forma presente en cada uno de nosotros. 

martes, 19 de agosto de 2014

Relatos de verano: Muerte de una avispa




Le gustaba comer a la sombra de su terraza en el jardín, la temperatura era muy agradable y la vista a los parterres de rosas, árboles frutales y la pradera de césped relajante. En cuanto olían la comida aparecían las avispas, era inevitable. Había optado por depararlas la mínima atención de la que era capaz. De ese modo no le arruinaban los almuerzos. Aquel día el rico plato de carne en salsa atrajo un buen número de ellas que se centraron en la cacerola apartada. Una de ellas ascendió por el cucharón para después caer de repente en la mesa quedando boca arriba. No era un movimiento habitual, algo pasaba. Resistió el impulso de aplastarla con la botella de agua, ahora que era presa fácil, y se quedó mirando. Las patas se movían como hacen las de un escarabajo panza arriba, también las antenas. Estas fueron las primeras en detenerse, luego en unos pocos segundos progresivamente todas las patas. El abdomen hizo una última contracción y el insecto quedó inmóvil, había muerto. Fue un desenlace limpio y breve, como seguramente sean los de estos seres. Sencillamente se apagan. 

Relatos de verano: La asamblea interior




No es verdad que tengamos un nombre, todos somos legión. En nuestro fuero interno habitan muchas presencias diferentes, pulsiones, intereses, deseos y necesidades que caminan juntas por la vida sin necesariamente entenderse. Cuando conseguimos alimentar razonablemente a todas la vida parece sonreirnos pero la cosa cambia cuando alguna entidad no se encuentra saciada. Todo sufrimiento humano, toda inquietud y desazón provienen de la ruptura de consenso, del grito interno de una instancia que no ha sido debidamente atendida. Nuestra reacción habitual ante este grito es tratar de sofocarlo cerrando puertas, marchando lejos. Pero nadie puede alejarse mucho de sí mismo, ni cerrarse las puertas de la vida. Todo grito interior se encarna en una emoción que viaja como una flecha hacia la conciencia tiñendo de su propio color el horizonte emocional de la persona. Ese color de fondo es la llamada que trata de solicitar consuelo, entendimiento y un poco de conciencia para que nos demos cuenta de que necesidad precisa ser colmada. No nos debe extrañar nuestra torpeza para tratar a los demás o para construir relaciones o sociedades justas, son pocos los que consiguen entablarlas consigo mismos. Por eso los sabios antiguos nos siguen recordando la prioridad de conocernos bien como camino imprescindible para entender el mundo. 

La sociedad intoxicada


 Imagen: proyecto Squatters


Pese a los kilos de drogas, psicofármacos, alcohol y publicidad que nuestra sociedad consume, parece que queda algún resto de conciencia crítica.



  1. ¿Qué pasaría si no delegaramos nuestro voto en políticos que nos engañan?
  2. ¿Qué pasaría si no consumieramos bienes y servicios que no necesitamos?
  3. ¿Qué pasaría si nos desconectaramos de la televisión, ordenadores y móviles para conectarnos a la naturaleza, el silencio, la gente que queremos ó lo que nos guste hacer?
  4. ¿Qué pasaría si fueramos un poco más despacio y pensáramos un poquito mejor?



Hay algún indicio de que las cosas están cambiando, ¿llegaremos a tiempo?




vía Pablo Soto

domingo, 17 de agosto de 2014

Publicidad tóxica




Lo que conocemos como publicidad está llegando a cotas tóxicas en nuestra sociedad.

 Implica una presión de ruido de fondo impresionante.

El desarrollo tecnológico hace que seamos más vulnerables y estemos más expuestos.

Las pantallas nos bombardean con mensajes publicitarios desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. También colonica nuestro ámbito privado llegando al teléfono móvil, ordenadores del trabajo y de casa, tableta, dispositivos portátiles, etc...





La publicidad manipula nuestro pensamiento y nuestros deseos. Coarta nuestra libertad.

Cada vez está produciendo más rechazo. La gente no quiere "consejos publicitarios que traten de vender algo" prefiere recomendaciones de las personas que conoce y tienen credibilidad.


El proyecto Squatters nace en Argentina en 2008 y plantea una forma de contrapublicidad crítica.




Como médico no me cabe duda de que la conexión permanente a dispositivos, canales de información y ruido de fondo publicitario está dañando nuestra capacidad de estar solos, de relacionarnos con nosotros mismos en silencio. Solo ahí podemos crear y generar ideas, proyectos y acciones propias. Solo ahí podemos pensar, reflexionar y decicir. La libertad humana se apoya en el silencio.


Mis recomendaciones a pacientes:

1. Sea crítico ante todo mensaje publicitario. Estará muy bien pensado para lograr convencerle para que consuma. ¿Lo necesita verdaderamente?

2. Tome conciencia del nivel de exposición a la publicidad en una semana normal (horas de TV+ horas de navegación por internet + horas de navegación con el móvil + radio + vallas publicitarias, etc...).

3. Desconecte todo lo que pueda del ruido de fondo. Cuide sus momentos semanales sin publicidad y sin pantallas. Cuide sus momentos de silencio consigo mismo y los momentos de comunicación con su gente querida.

4. Favorezca una cultura de la recomendación personalizada, para ello tenga en cuenta la opinión de las personas que le conocen bien y dé la suya a los que usted conoce. Comparta su conocimiento, sus ideas y sus reflexiones, seguro que serán valiosas para otras personas.






Agradezco a la dra. Gema Ponce por la referencia al proyecto Squatters.










sábado, 16 de agosto de 2014

Relatos de verano: los dos zorros



Foto: wikipedia




Mientras corría por el campo aquel atardecer de verano vio a lo lejos una bolsa de plástico blanca en el camino, se movía y no hacía viento. Unos segundos después vio los dos zorros que jugaban con ella. Inició un spring y los animales huyeron tan solo en el último instante, a penas a cinco metros de llegar. Siguió corriendo. La bolsa inerte quedó atrás.

Más tarde, mientras tomaba un vaso de agua fresca sentado en su terraza, pensó en los pobres zorros. Le dieron ganas de gritarles que se fueran, que huyeran lejos. Viviendo tan cerca de una carretera y de varias urbanizaciones su pronóstico vital no era bueno. Los seres humanos son una especie muy peligrosa. Lamentablemente no pudo hacer más que pensarlo. Aquellos zorros seguirían jugando, correteando y cazando no se sabe bien cuantos meses. En cualquier caso el tiempo siempre parece tener un fin, parece ser finito, semeja ser escaso. Quizá no signifique nada para los zorros, como tampoco para el sol o el planeta tierra. ¿No sería mejor dedicar la vida a jugar tranquilos que a reflexionar sin descanso?

Dejó el vaso en la encimera de la cocina. Suspiró. Verdaderamente necesitaba unas vacaciones.


jueves, 14 de agosto de 2014

Los brazos de la muerte






En ocasiones la vida nos enfrenta con circunstancias abyectas, con la dificultad, la tormenta o el desierto. Siempre ha sido así. Nuestros predecesores sortearon toda clase de pruebas para que nosotros podamos estar hoy aquí al frente de esta pantalla. Algunos se encararon a osos cavernarios, tigres  de dientes de sable, leones. Otros se enfrentaron al mar montados en barcas hechas de juncos. Sobrevivieron guerras, hambrunas y desastres.

Cuando miró a mi alrededor no puedo evitar preguntarme si mereció la pena. Es verdad que tenemos la música, la poesía y el testimonio de muchas mujeres y hombres que aportaron su grano de arena de sentido. Sin embargo el otro lado es devastador: la opresión y el horror causado por el hombre, la depredación superlativa, la codicia sin límite... aunque el peor de los males sigue siendo la ignorancia. Seguimos sin comprender qué significa estar vivos. Tal vez nos hemos alejado mucho de la muerte. 

Esta semana hablé con un hombre al que acababan de transmitirle un diagnóstico infausto con una muy corta esperanza de vida. No quería tratamiento activo contra la enfermedad, que por otra parte, y por su extensión, no era posible. Tan sólo pedía calmantes si fueran necesarios y que le dejarán morir en paz en su casa. Este tipo de situaciones son sumamente cotidianas pero no se comparten, la muerte es el gran tabú de nuestra época. Al no enfrentarnos a la muerte, al haberla sacado de nuestra cotidianidad la hemos convertido en una sombra aterrorizante que siempre anda pululando a nuestra espalda sin ser capaz de llevar a cabo su misión sanadora de dar sentido a la vida. No es posible entender la luz sin la sombra ni la palabra sin el silencio. Por ello me sorprendo de esta actitud globalizada que al desdeñar lo que más nos asusta nos convierte paradójicamente en criaturas vulnerables, manipulables y aterrorizadas. ¿Seremos capaces de asumir los retos que la vida nos tiene reservados? ¿Seremos capaces de mirar a la cara a la muerte para poder así mirar a la vida de frente?









죽음의 무기


때때로 인생은 어려움, 또는 사막의 폭풍, 비참한 상황으로 우리를 직면. 그것은 항상있다. 우리가이 화면 앞에 여기에 대한 우리의 전임자 증거의 종류를 추첨. 일부는 동굴 곰, 세이버 이빨 호랑이, 사자에 직면하고 있습니다. 다른 사람들은 갈대로 만든 보트에 장착 된 바다에 직면했다. 그들은 전쟁, 기근 재난에서 살아 남았다.

내가 보았을 때 주위에 내가 도울 수 있지만, 그것의 가치가 있었다 궁금 할 수 없습니다. 우리가 음악,시와 그 비트가 의미가 기여 많은 여성과 남성 증거를 가진 것은 사실이다. 남자, 최상급 포식, 무제한 탐욕 ... 악마 최악있을지라도 무지에 의한 억압과 공포 :하지만 다른 측면 파괴입니다. 우리는 여전히 살아 있다는 것이 무엇을 의미하는지 이해하지 않습니다. 아마도 우리는 지금까지 죽음을 벗어나있다.

이번 주에 난 그냥 매우 짧은 수명 치명적인 진단을 전송 남자와 말했다. I 반면에, 질환에 대하여 치료 활성 원하지 않았고, 연장에 의해, 그것이 가능하지 않았다. 그냥 필요한 경우 진통제 묻는 집에서 평화롭게 죽을 수 있도록. 이러한 상황은 매우 일상하지만 공유되지, 죽음은 우리 시대의 위대한 금기이다. 하지 않음으로써 죽음에 직면 우리는 항상 삶에 의미를주는 치유 임무를 수행 할 수없이 우리 뒤에 떠오르게하는 무서운 그림자가되었습니다 우리의 일상 생활에서 제거하는 데. 당신은 침묵없는 그림자 나 워드없이 빛을 이해할 수 없습니다. 대부분의 우리를 놀라게 태만 글로벌 태도는 조작 겁에 질린 생물, 우리가 역설적으로 취약하게 놀란다. 우리는 생명이 우리를 예약 한 것을 과제를 충족 할 수 있습니까? 우리는 죽음의 얼굴을 수있을 것인가 얼굴에 삶을 볼 수 있나요?




(자동 번역, 실수 죄송합니다)

miércoles, 13 de agosto de 2014

Relato de verano: El paradigma cambió


Edward Hopper




No lo sabían aún pero el paradigma ya había cambiado. Algunos lo intuían pese a su invisibilidad. Se estaban extinguiendo. La cifras de crecimiento poblacional seguían aumentando, el consumo, la polución, la industrialización, la globalización... ciertamente era difícil de ver.

El el ártico un grupo de científicos descubrió que el subsuelo estaba liberando enormes cantidades de metano. El calentamiento sería mayor y, sobre todo, más brusco de lo que habían predicho. La meteorología produciría múltiples inclemencias y enormes sequías. Movimientos enormes de población, hambrunas, guerras para el control del agua...

Mientras tanto, el sector más acomodado, el pequeño porcentaje que cada vez controla más recursos, seguirá invirtiendo hasta conseguir emanciparse de la especie. El transhumanismo les convertirá en super-hombres con nuevas y extendidas capacidades. La especie se romperá, y del hundimiento de lo viejo surgirá la emergencia de algo completamente nuevo.






martes, 12 de agosto de 2014

Collado Villalba: Invertir en salud










Los ayuntamientos están en crisis, las arcas suelen estar vacías en casi todos lados. Sin embargo a veces es posible encontrarse con buenas ideas. La que rescato hoy es un ejemplo de inversión en salud. No se trata de abrir más centros sanitarios ni de aumentar plantillas, es otra cosa. Se trata de facilitar que los vecinos de una localidad lo tengan más fácil a la hora de pasear y hacer deporte. En una localidad serrana como Collado Villalba la idea consiste en mejorar uno de los paseos de la villa, el que rodea la dehesa Boyal, unos 4 km que los vecinos usan para pasear, correr y montar en bici.

Mejorar los caminos, iluminar ciertas zonas, instalar fuentes... es toda una declaración de inteciones para invitar a todo el mundo a darse un paseo. Creo que es una de las mejores inversiones en salud que se pueden hacer. Y visibilizar las buenas ideas es justo reconocimiento a las mimas. 









lunes, 11 de agosto de 2014

La jornada #Videosysalud cada vez más cerca






Ya contamos con más de 120 inscritos, quedan pocas plazas. Anímate y participa de forma presencial o virtual con nuestro equipo de Vídeos y Salud. Un grupo de profesionales sanitarios que quiere comunicarse mejor con sus pacientes usando lenguaje audiovisual y todo lo que facilite entendernos mejor.

Para grabar un mensaje no hace falta mucho, se puede hacer incluso en un medio de transporte, con un teléfono móvil. Sólo hace falta tener una idea y atreverse a compartirla.


www.videosysalud.es








Lenguaje musical y otros lenguajes en consulta





La música es un lenguaje que vamos aprendiendo desde pequeños. Hay muchos lenguajes más allá de las lenguas. El mito de la torre de Babel sigue siendo plenamente vigente.

Por eso no debemos extrañarnos de que la comunicación humana sea tan compleja, haya tantos malentendidos y cueste tanto entenderse.

No basta con decir "coma sano y haga ejercicio", "deje el tabaco y póngase a pasear"...

Tal vez nos toque escuchar de otra manera y emitir mensajes de otra manera.


Tal vez nos toque coger un violín o una viola de gamba en la consulta y acomenter una ricercada de Diego Ortiz ó una canción celta, según requiera la persona en tiempo de enfermar que tengamos delante.

Tal vez nos toque hacer un dibujito en un papel o cargar en pantalla una imagen de internet, justo la que al paciente le venga mejor para entender lo que le pasa.


Tal vez buscar un vídeo o un enlace y dárselo al paciente en un papelito. O quizá mantener un instante la mirada mientras compartimos un pequeño silencio.


De lo que me doy cuenta es que la comunicación humana es un proceso altamente creativo. La sanidad del corta y pega no sirve, no puede servir. Hemos olvidado que no hay enfermedades sino enfermos. Nos centramos en la enfermedad, siempre la misma y obviamos al enfermo, dejamos de escucharle.

Recuperar esa vieja creatividad de los antiguos médicos es una tarea apremiante. El último metro está a pundo de salir...





Vídeo vía Rafa Cofiño





 









domingo, 10 de agosto de 2014

Todo lo que hay












El último libro de James Salter es un trabajo excelente. Un paseo por paisajes emocionales llevados de la mano de personajes estadounidenses de hace cincuenta años. Una narración de encuentros, desencuentros, pasiones y traiciones... La vida misma.

La buena literatura siempre es evocadora, capaz de hacernos asomar a realidades y universos que, sin llegar a ser los nuestros, nos permite vestir por unas horas situaciones que nos convierten en otros. Este despegamiento de nuestro ego siempre es liberador, dado que él mismo pesa, en ocasiones demasiado.

Salter es un buenísimo escritor, con oficio. Nada que ver con los éxitos habituales de las librerías. No es solo cuestión de tener una buena historia que contar, el arte estriba en contarla quitándose de en medio, dejando que sea el lector el que baile con los personajes a su gusto.

Las relaciones liquidas que nos muestra el autor no son quizas extrapolables a las que establezcamos pero ponen de manifiesto que el paisaje relacional está cambiando rápido y que hay muchos mundos y vidas delante de nosotros.

Merece la pena leer en verano, nos ayuda a viajar de otra manera por la vida.




All that is

James Salter´s last book is an excellent work. A walk through emotional landscapes led by the hand of fifty years ago american characters. A narrative of events, encounters, passions and betrayals ... Life itself.

Good literature is always evocative, can make us poke realities and universes, without becoming ours allows us to dress for a few hours situations that make us other. This detachment of the ego is always liberating, since he weighs sometimes too.

Salter is a terrific writer, he knows the art of writting. Something different to the usual bookstores hits. It isn´t just a matter of having a good story to tell, the art of writting is based in removing oneself off the way, leaving  the reader dancing with the characters at their own pleasure.

The liquid  relationships the author write down may be different to ours but show that the relational landscape is changing fast and there are many worlds and lives ahead of us.

Reading in summer it´s worthy, it helps us to travel through life in an other elegant way.












sábado, 9 de agosto de 2014

Somos un universo









Foto de Dennis Kunkel vía @tapasdeciencia




Es frecuente que ciertos problemas tengan la virtud de abducirnos completamente capturando nuestra atención de forma casi parasitaria. De hecho todo pensamiento se basa en una idea, en un meme, que de alguna forma busca perpetuarse en el tiempo. Por ende no dejamos de pensar en ellos. Esto genera mucho parloteo interno y sufrimiento, acabamos las jornadas agotados sin poder quitarnos de la cabeza la idea que tanto nos preocupa.

Nos olvidamos que somos un universo.

Volver a recordarlo es siempre parte de la solución a nuestros problemas que vuelven a recuperar su tamaño original cuando dejamos de mirarlos tan de cerca.

La foto que ilustra el post muestra una ampliación de una gota de sangre, con cierta licencia artística en cuanto a la coloración de las partículas. En cualquier caso me parece que ilustra bien la belleza y complejidad que nos conforma. Somos pura levedad, y a la vez todo un cosmos hermoso que apenas entendemos.








viernes, 8 de agosto de 2014

¿Por qué hay tanto interés en diluir la figura del médico de familia?





El paradigma de decrecimiento es una gran amenaza para todos los sistemas sanitarios, ávidos consumidores de recursos del PIB de cualquier país. El incremento de los precios de los nuevos medicamentos, tecnologías y tratamientos, la complejidad creciente de los pacientes crónicos y el aumento de la edad poblacional conforman un cóctel explosivo a nivel monetario de no fácil solución.

Ante estos retos hay dos aproximaciones.

La primera defiende la potenciación de la atención primaria y la figura del médico de familia que puede aportar continuidad de cuidados, cerca del paciente, conociendo bien sus características, familia y comunidad. Estos valores son muy útiles y eficientes en el manejo y cuidado de pacientes de todo tipo y edad pero sobre todo en los complejos que de otra manera precisarían múltiples ingresos y cuidados hospitalarios mucho más costosos y con más complicaciones. Para potenciar al médico de familia sería fundamental, entre otras cosas, la reducción de la burocracia, mejores circuitos de coordinación, sistemas informáticos unificados, un módulo de prescripción único compartido con el hospital y una financiación priorizada de los centros de salud.

La segunda aproximación es la contraria, invita a que en todos los centros de salud haya pediatras y geriatras para atender a los más mayores y los más pequeños. Se reducirían los generalistas que priorizarían la accesibilidad y no la longitudinalidad, es decir cada vez atendería un médico distinto al paciente pudiendo acudir éste en el momento que desee. Cada vez se invertiría menos en este nivel en beneficio de los hospitales. Las fronteras entre atención primaria y secundaria serían más borrosas con más presencia del hospital en todos los ámbitos: unidades de crónicos, enfermeras de casos o de enlace, unidades de hospitalización domiciliaria... no hay evidencia científica de que estas iniciativas sean más eficientes, pero hay muchísimos planes de implementación.


El enfoque que está prevaleciendo es el segundo pese a ser mucho más costoso y no necesariamente aportar calidad. No hay un claro beneficio para los pacientes ni para el ciudadano en general que tendrá que pagar más por el sistema sanitario. El consumo de tecnología será mayor y el de medicación y otros tratamientos no claramente indicados. Dado que en muchos casos las unidades hospitalarias están sobredimensionadas, conquistar parcelas de la tradicional atención primaria sería una solución para deslocalizar recursos o diréctamente facilitar su gestión privada.

¿Quién sale ganando?

La fragmentación de la atención en un paradigma que tiende a la especialización del conocimiento hace que cada vez que una persona tiene un problema de salud acuda al experto que le dé solución. Lamentablemente esto hace perder el enfoque longitudinal y la perspectiva de vida del paciente. Se dan soluciones parciales pero no se atiende a la globalidad/complejidad de la persona por lo que es frecuente que muchos problemas no queden resueltos y el paciente vuelva a buscar ayuda en el sistema.

El paradigma generalista trata de entender al paciente y su circunstancia,  sus problemas biológicos pero también los psicológicos, sociales y existenciales. Es la forma en que durante muchos años se ha ejercido la medicina de la mano de médicos cercanos físicamente al ciudadano, buenos conocedores de la información "blanda" que permite al profesional entender qué le pasa en realidad a la persona que tiene delante.

Los paneles de expertos suelen emitir las conclusiones del patrocinador del mismo, conozco pocos expertos que trabajen gratis. Los servicios públicos están amenazados por muchos paneles de expertos. Por eso no puedo menos que preguntarme lo mismo que en las novelas y películas de crímenes ¿quién sale ganando con esto? la respuesta siempre nos orientará al asesino...






Agradezco a Juan Gérvas por el editorial de Jama que me facilitó y a Sergio Minué por el estupendo post que cito arriba.



Per què hi ha tant d'interès a diluir la figura del metge de família?


El paradigma de decreixement és una gran amenaça per a tots els sistemes sanitaris, àvids consumidors de recursos del PIB de qualsevol país. L'increment dels preus dels nous medicaments, tecnologies i tractaments, la complexitat creixent dels pacients crònics i l'augment de l'edat poblacional conformen un còctel explosiu a nivell monetari de no fàcil solució.

Davant aquests reptes hi ha dues aproximacions.

La primera defensa la potenciació de l'atenció primària i la figura del metge de família que pot aportar continuïtat de cures, a prop del pacient, coneixent bé les seves característiques, família i comunitat. Aquests valors són molt útils i eficients en el maneig i cura de pacients de tot tipus i edat però sobretot en els complexos que d'altra manera necessitarien múltiples ingressos i cures hospitalàries molt més costosos i amb més complicacions. Per potenciar al metge de família seria fonamental, entre altres coses, la reducció de la burocràcia, millors circuits de coordinació, sistemes informàtics unificats, un mòdul de prescripció únic compartit amb l'hospital i un finançament prioritzada dels centres de salut.

La segona aproximació és la contrària, convida a que en tots els centres de salut hagi pediatres i geriatres per atendre els més grans i els més petits. Es reduirien els generalistes que prioritzarien l'accessibilitat i no la longitudinalitat, és a dir cada vegada atendria un metge diferent al pacient pot acudir aquest en el moment que desitgi. Cada vegada s'invertiria menys en aquest nivell en benefici dels hospitals. Les fronteres entre atenció primària i secundària serien més borroses amb més presència de l'hospital en tots els àmbits: unitats de crònics, infermeres de casos o d'enllaç, unitats d'hospitalització domiciliària ... no hi ha evidència científica que aquestes iniciatives siguin més eficients, però hi ha moltíssims plans d'implementació.

L'enfocament que està prevalent és el segon malgrat ser molt més costós i no necessàriament aportar qualitat. No hi ha un clar benefici per als pacients ni per al ciutadà en general que haurà de pagar més pel sistema sanitari. El consum de tecnologia serà més gran i el de medicació i altres tractaments no clarament indicats. Atès que en molts casos les unitats hospitalàries estan sobredimensionades, conquerir parcel · les de la tradicional atenció primària seria una solució per a deslocalitzar recursos o diréctament facilitar la seva gestió privada.

Qui surt guanyant?

La fragmentació de l'atenció en un paradigma que tendeix a l'especialització del coneixement fa que cada vegada que una persona té un problema de salut acudeixi a l'expert que li doni solució. Lamentablement això fa perdre l'enfocament longitudinal i la perspectiva de vida del pacient. Es donen solucions parcials però no s'atén a la globalitat / complexitat de la persona pel que és freqüent que molts problemes no quedin resolts i el pacient torni a buscar ajuda en el sistema.

El paradigma generalista tracta d'entendre el pacient i la seva circumstància, els seus problemes biològics però també els psicològics, socials i existencials. És la forma en què durant molts anys s'ha exercit la medicina de la mà de metges propers físicament al ciutadà, bons coneixedors de la informació "tova" que permet al professional entendre què li passa en realitat a la persona que té davant.

Els panells d'experts solen emetre les conclusions del patrocinador del mateix, conec pocs experts que treballin gratis. Els serveis públics estan amenaçats per molts panells d'experts. Per això no puc menys que preguntar-me el mateix que en les novel · les i pel · lícules de crims ¿qui surt guanyant amb això? la resposta sempre ens orientarà l'assassí ...

Agraeixo a Joan Gérvas per l'editorial de Jama que em va facilitar ia Sergio Minué pel fantàstic post que cito a dalt.

(traducció automàtica, perdó pels errors)


jueves, 7 de agosto de 2014

Un tercio de los pacientes no entiende a su médico










Seguimos sin conseguir que médicos y pacientes se entiendan. Parece que un tercio de los pacientes no entiende a su médico, el dato es preocupante. ¿Por qué ocurre esto? Las razones son múltiples y antiguas, lamentablemente siguen vigentes y todo parece indicar que esta brecha de comunicación se hace cada vez mayor.


1. Los médicos no suelen escuchar adecuadamente.

El tiempo medio que tarda un médico en interrumpir la explicación de sus pacientes es de 12 segundos. En España los médicos de familia tienen de media 5-7 minutos por paciente, mucho menos que en otros países. No es fácil escuchar cuando hay que trabajar tan rápido.

Por otro lado hay muchas distracciones. El sistema informático del sistema sanitario precisa ser alimentado con muchísimos datos, lo que obliga al galeno a dedicar más tiempo a la pantalla del ordenador que a los ojos del paciente. Las llamadas telefónicas, las interrupciones de otros colegas, enfermeras o administrativos, las urgencias, los pacientes sin cita y un sin fin de imponderables distraen con frecuencia la atención.

2. Los médicos siguen usando lenguaje técnico.

Formar un médico precisa más de diez años, en ese tiempo aprenden a hablar una lengua técnica que les permite traducir lo que le pasa al paciente a un vocabulario científico en el que se apoyan el diagnóstico y el tratamiento del proceso. Usar este lenguaje sin la correspondiente adaptación hace que el paciente no se entere bien de lo que pasa, lo que se espera tiene que hacer y los cuidados que se precisan.


3. Los médicos no consiguen explicarse de una forma entendible. 

Por mucha voluntad que le eche el médico, es frecuente que la persona que acuda a consulta tenga dificultades de comprender por muchas razones. Una de las principales es el agobio que suele acompañar este tipo de visitas. Una persona nerviosa entiende peor que una tranquila. Por eso en consultas complejas es aconsejable hacerse acompañar de alguien de confianza. Por otro lado suele ser bastante útil que los profesionales sanitarios se ayuden en sus explicaciones de dibujos, diagramas, fotos e imágenes. También se puede proporcionar información escrita o en vídeo que el paciente y su familia puedan ver posteriormente.


La comunicación es la base de todo sistema sanitario y de todo encuentro asistencial. Su mala calidad afecta todos los procesos, encareciéndolos ya haciéndolos más penosos y peligrosos.

Mejorar la comunicación asistencial es prioritario pero no encontrarán, por mucho que busquen, políticas, líneas de gestión o propuestas de calado para mejorarla, más bien todo lo contrario. Sí existen muchos profesionales bien intencionados que hacen todo lo posible por comunicarse mejor con sus pacientes pero suele ser infructuoso cuando cada vez hay que ver más pacientes en menos tiempo y se presiona a estos profesionales  por todas partes.

Los pacientes pueden ayudar planificando sus visitas y tratando de usar con moderación y prudencia el sistema sanitario. Los profesionales tomando conciencia de sus limitaciones y tratando de mejorar la formación continudada en comunicación asistencial. Por último los gestores y políticos salvaguardando unos tiempos mínimos de consulta y una organización que no agobie excesivamente a sus facultativos. 





miércoles, 6 de agosto de 2014

No bombardees a tu hermano טאָן ניט באַמבאַרד דיין ברודער لا قصف أخيك








En España tuvimos hace unos años una guerra que enfrentó a hermanos entre sí. Nuestros abuelos la vivieron, no hace mucho tiempo. En Europa no ha dejado de haber guerras de hermanos contra hermanos. Nadie está en una posición superior a otro para decirle lo que tiene que hacer pero parece sensato defender la postura de no matar a los hermanos.

La humanidad ha conseguido avanzar en muchos aspectos, aún queda camino. Puedo decir que me siento mal cuando alguien bombardea a mis hermanos estén estos donde estén. Mi sueño se resiente, mis ánimos también. Provocar sufrimiento a los demás no es bueno para nadie.

Escribirlo tal vez no tenga sentido o tal vez sí. Si consiguiéramos llenar el mundo de palabras de paz, si fuéramos muchos los que enarboláramos poesías tal vez las cosas serían diferentes.




Dejen de bombardear a mis hermanos
¿no se dan cuenta de que también son suyos?
como siempre lo han sido...
hay una sola humanidad
con una única sangre
en ella reposa la memoria,
la música, las mil viejas historias.

Dejen de disparar a mis hermanos
su sufrimiento es enteramente mío
como también es vuestro
humo transparente que infiltra nuestros sueños,
el corazón, el alma, los íntimos manojos de ilusiones.

Abran su mente como hicieron sus padres
abran el corazón como valientes
y donde antes los monstruos
ahora conseguirán ver otros hermanos
porque cuando uno camina lentamente
los senderos antiguos de la paz
termina siempre llegando
a la fuente primera que regala el sentido
y nos permite ser lo que hay que ser.





Do not bombard your brother


In Spain a few years ago we had a war that pitted brothers together. Our grandparents lived it not long ago. In Europe´s history it´s a continu brother against brother war list. Nobody is in a higuer position to tell others what to do but defend not to kill brothers seems to be sensible.


Mankind has made ​​progress in many respects, but it´s still some way ahead. I can say that I feel bad when someone bombards my brothers whererever they are. My dream is suffering, my emotions too. Cause suffering to others is not good for anyone.

Write it down may not make sense or might. If we could fill the world with words of peace, if we bring together many poems things would be different.





Stop bombarding my brothers,

do not realize that they are also yours?

as they have always been.

There is one humanity

with a single blood

it flows in the memory,

music, thousand old stories.

 

Stop shooting my brothers

their suffering is entirely mine

as is also your

transparent smoke that infiltrates our dreams,

the heart, the soul, the inner bundles of illusions.

 

Open your mind as your parents did

open your hearts as brave

and where before the monsters
 

now you get to see other brothers

because when you walk slowly

the ancient paths of peace

always ends up coming

the first source that gives the sense

and allows us to be what we must be.





لا قصف أخيك  
 

في اسبانيا منذ سنوات قليلة كان لدينا الحرب التي تدور الإخوة معا. أجدادنا عاشوا منذ وقت ليس ببعيد. في أوروبا واصلت لتكون حروب الأخ على أخيه. لا أحد في موقف غير ان اقول لكم ما يجب القيام به ولكن الدفاع عن الموقف يبدو معقولا لا لقتل الأشقاء.



حققت البشرية تقدما في العديد من النواحي، لا يزال بعض الطريق. أستطيع أن أقول أنني أشعر بالضيق عندما يقصف شخص إخواني إذا كانت أين هم. حلمي يعاني، معنوياتي جدا. يسبب معاناة للآخرين ليست جيدة لأحد.

إرسال فإنه قد لا يكون له معنى أو القوة. لو تمكنا من ملء العالم مع كلمات السلام، إذا كنا كتبنا العديد من القصائد ربما الأمور ستكون مختلفة.







وقف قصف إخوتي

لا يدركون أنهم أيضا لك

كما كانت دائما

هناك واحد الإنسانية

مع دم واحدة

انها تقع في الذاكرة،

الموسيقى، آلاف القصص القديمة.

وقف اطلاق النار إخواني

معاناتهم من الألغام كليا

كما هو ايضا على حياتك

الدخان الشفافة التي تتسرب أحلامنا،

القلب، والروح، وحزم الداخلية من الأوهام.

فتح عقلك كما فعل والديهم

فتح قلوبهم الشجعان كما

وحيث قبل وحوش

الآن أنها تحصل على رؤية الإخوة الآخرين

لأن عند المشي ببطء

مسارات القديمة السلام

دائما ينتهي القادمة

المصدر الأول الذي يعطي الإحساس



 
ويسمح لنا أن نكون ما يجب أن نكون.



(الترجمة الآلية، آسف للاخطاء)






טאָן ניט באַמבאַרד דיין ברודער


אין ספּאַין אַ ביסל יאָרן צוריק מיר האבן אַ מלחמה אַז פּיטאַד ברידער צוזאַמען. אונדזער זיידע - באָבע געלעבט ניט לאַנג צוריק. אין אייראָפּע עס האט געצויגן צו זיין מלחמות פון ברודער קעגן ברודער. קיינער איז אין אַ פּאָזיציע אנדערע ווי צו זאָגן איר וואָס צו טאָן אָבער באַשיצן די פּאָזיציע מיינט פיליק ניט צו טייטן די ברידער.



מענטשהייַט האט געמאכט פּראָגרעס אין פילע שייך, איז נאָך עטלעכע וועג. איך קענען זאָגן אַז איך פילן שלעכט ווען עמעצער באָמבאַרדס מיין ברידער אויב זיי זענען ווו זיי זענען. מייַן חלום איז צאָרעס, מיין שטימונג אויך. גרונט צאָרעס צו אנדערע איז ניט גוט פֿאַר ווער עס יז.

שרייב עס קען ניט מאַכן זינען אָדער זאל. אויב מיר קען פּלאָמבירן די וועלט מיט ווערטער פון שלום, אויב מיר זענען מיר געשריבן פילע לידער אפֿשר זאכן וואָלט זיין אַנדערש.







האַלטן באַמבאַרדינג מיין ברידער

טאָן ניט פאַרשטיין אַז זיי זענען אויך דייַן

ווי זיי האָבן שטענדיק געווען

עס איז איינער מענטשהייַט

מיט אַ איין בלוט

עס ליגט אין די זיקאָרן,

מוזיק, טויזנט אַלט מעשיות.

האַלטן שיסערייַ מיין ברידער

זייער צאָרעס איז לעגאַמרע מייַן

ווי איז אויך דיין

טראַנספּעראַנט רויך אַז ינפילטראַטעס אונדזער חלומות,

די האַרץ, די נשמה, די ינער באַנדאַלז פון ילוזשאַנז.

עפענען דיין מיינונג ווי זייער עלטערן האט

עפענען זייער הערצער ווי העלדיש

און ווו איידער די מאָנסטערס

איצט זיי באַקומען צו זען אנדערע ברידער

ווייַל ווען איר גיין סלאָולי

די אלטע פּאַטס פון שלום

שטענדיק ענדס אַרויף קומען

דער ערשטער מקור אַז גיט די געפיל

און אַלאַוז אונדז צו זייַן וואָס מיר מוזן זיין.



(אָטאַמאַטיק איבערזעצונג, נעבעכדיק פֿאַר די מיסטייקס)